Así no se construye una gran Liga

LA IMPROVISACIÓN MANDA. Quedan dos semanas para que el FC Barcelona empiece a andar siendo, posiblemente, de los últimos equipos en saltar al ruedo por acabar la temporada más tarde que nadie debido a la disputa de la final de la Champions. Cuando esto ocurra, el 13 de julio, los jugadores pueden incluso no saber cuándo empezará la Liga porque el sorteo está previsto para el día siguiente. A estas alturas, la LFP y la AFE todavía no se han puesto de acuerdo en saber cuándo empieza el campeonato, detalle importante que viene a demostrar que esta Liga, en aspectos organizativos, está a años luz de las restantes europeas. No se puede pretender alcanzar una dimensión global sin tener claro a estas alturas cuándo empieza el torneo y cuándo se disputa la Supercopa de España, partidos que encontrarán ubicación una vez se defina la Liga. La LFP y la AFE están a un paso de pedir auxilio a papá CSD para que tome una decisión sobre la fecha de inicio del torneo. En muchos aspectos, esta Liga la aguanta Cristiano y Messi y el Barcelona y Madrid. ¿Qué pasaría si uno de estos cuatro actores desapareciera del escenario? Una tragedia que pondría al descubierto las debilidades del campeonato. 

Solo hay que echar un vistazo a otros torneos para darse cuenta de cómo se improvisa. 

La Premier, siempre el ejemplo de buen funcionamiento estando a años luz del nivel futbolístico del español, sorteó el pasado 14 de junio el calendario de la competición sabiéndose desde entonces los enfrentamientos de todos los encuentros e incluso los horarios de los mismos, algo en la competición española ha mejorado en este aspecto pero que todavía le queda un mundo por delante.